No ha pasado demasiado tiempo desde que la ‘Fibra Óptica‘, el cableado de Internet más rápido del mundo, fue presentado oficialmente. Y como lo anunciaron en un inicio, esta tecnología podía superarse a sí misma.
Eso sí, jamás se pensó que llegaría a velocidades que el día de hoy fueron confirmadas. Felizmente, siempre existen personas con hambre de hacer historia, como es el caso de los ingenieros que realizaron este proyecto.
Como esta tecnología se basa en láseres, la velocidad de transmisión de datos depende de la potencia de ellos. Por lo que se ideó adicionar colores de luz (la materia que forma un láser) para ampliar el ancho de banda; algo que se conoce como ‘multiplexación por división de longitud de onda‘.
Lo malo es que cada color necesita ser reproducido por separado, por lo que esto fue el paso más complicado del proyecto. Y en realidad, es el mismo paso que destacó a los ingenieros de este récord; pues ellos fueron los únicos que lograron desarrollar un cable ultra fino (300 nanómetros de diámetro) para comprimir la luz y que ésta fuera más brillante.
Afortunadamente, tal experimento funcionó perfectamente. Incluso se generó nuevos colores que se reproducían en su forma más pura. En total, el láser generó 80 colores distintos, una locura total que logró una velocidad de 661 Terabytes por segundo.
Según los ingenieros, su proyecto puede rendir mucho más del récord ya impuesto. Es más, su tecnología logró transportar 30 núcleos que sirven para llevar luz de un sitio a otro. En total, esos 30 núcleos aseguran una velocidad teórica de 765 Tb/s. Pero todavía no existe prueba de que efectivamente se haya logrado tal velocidad.
Con este proyecto, este grupo de ingenieros han dejado la valla muy alta para quien desee desarrollar esta tecnología. Para el resto del mundo, su labor debería ser aplaudida sin cansancio y premiada por su ingenio.
Vía Xataka