En los últimos años, la tecnología de los ‘exoesqueletos‘ se ha vuelto un boom en muchos países, sobretodo en aquellos en donde la población de tercera edad es abundante.
Estos productos son creados con la idea de ‘quitarnos peso’, es decir, de aligerar el trabajo de algún grupo de músculos. Por ejemplo, ingenieros de la Universidad de Stanford, acaban de presentar su versión, la cual será ideal para trabajos con las piernas.
Su mecanismo consiste en tirar de cables para aligerar el esfuerzo del usuario, y con solo esta acción, ya reducirá el esfuerzo en un 15% y aumentará la velocidad en un 10%, una locura total. ¿Unos cuantos fierros y cables nos pueden hacer correr más rápido?
Así es, y esto solo es el comienzo, pues el prototipo todavía es algo engorroso, ya que usa un motor grande para funcionar. El paso siguiente es reducir el tamaño del exoesqueleto e incluir el motor en una de las piernas.