Desde los años 60, Hong Kong vive una serie de ‘movilizaciones ciudadanas‘ para velar por la seguridad y los derechos de sus habitantes.
Estas marcha anuales comenzaron cuando la ciudad todavía estaba bajo el control británico; pero a día de hoy, la tregua todavía no llega, aunque ahora se lucha por otro propósito: la autonomía legal.
Este tema choca bruscamente con el encaje de Hong Kong en China; los manifestantes aseguran que su ciudad debe continuar como una ‘región administrativa especial’. Sin embargo, se sabe que el régimen comunista instaurado en el Gobierno Chino trata de converger esta ciudad con el país asiático.
De esta manera, la lucha es constante entre ambos bandos; pero el Gobierno tiene un ‘as‘ bajo la manga: Un sistema de vigilancia masiva dotados con tecnología de reconocimiento facial. Es más, estos sistemas son tan avanzados que también detectan características corporales en caso se cubran el rostro.
Por supuesto, los manifestantes siempre buscan salirse con la suya; y en una marcha ocurrida el 31 de Julio, se presenció la utilización de láseres para evitar estos sistemas avanzados:
Y eso no es todo, como el Gobierno Chino es famoso por tener un máximo control de sus ciudadanos; los habitantes de Hong Kong empezaron a comprar billetes de tres manualmente, ya no por aplicaciones ni maquinarias. Esto es para que el ‘sistema‘ no reconozca sus identidades.
DaTEC: Colin Cheung, un activista que aboga en contra de estos sistemas de ultra-vigilancia, fue detenido tras ser acusado de crear una herramienta de ‘contra-vigilancia facial‘; con el cual se fotografían agentes policiales y se almacenan en un ordenador para luego ser identificados. Según el activista, desarrolló este sistema cuando los policías dejaron de portar sus ‘carnet’ o números de identificación.