Las autoridades de Corea del Sur acaban de arrestar a dos sujetos involucrados en el delito de violentar contra la privacidad personal.
Según las investigaciones, los tipos grabaron a más de 1600 personas con una cámara oculta en habitaciones de un hotel. Este dispositivo estaba ubicado en posiciones diferentes de cada habitación. Desde los focos, hasta los tomacorrientes eran utilizados; y todas las grabaciones se transmitían en vivo por internet.
La práctica de grabar a personas en espacios públicos es denominada ‘molka‘ en este país. Por supuesto, gente desadaptada goza de estos videos en baños o cuartos privados. En 2017, hubieron 6470 denuncias realizadas contra estas acciones.
Es más, por esta misma razón, miles de mujeres se reunieron en las calles de Seoul para protestar sobre esta ‘tendencia’; la cual está creciendo en popularidad con una velocidad impresionante. En 2012, se registraron 1353 denuncias; una cifra muy inferior a la del año pasado.
En este escándalo de los hoteles, la policía detalló que al menos la mitad de las 1600 víctimas, son varones. En total, fueron 42 habitaciones con ‘spycams’, pero éstas estaban distribuidas en 30 hoteles de 10 ciudades distintas.
Esta red de espías ha logrado generar una comunidad de más de 4000 miembros. Los sujetos responsables vendían una suscripción mensual a este sitio en donde todo el contenido era transmitido en vivo. El costo de ingreso a esta web era de 45$.
Aún no se detalla si los hoteles han sido cómplices del escándalo, pero la policía ya está investigando a fondo. En cuanto a los dos sujetos, ambos deberán pagar una multa de 30 millones de won (26,500$) y permanecer en prisión por un máximo de cinco años.
DaTEC: La marcha realizada por miles de mujeres en Seoul fue tan masiva porque en esa época, una muchacha fue arrestada por fotografiar secretamente a un modelo desnudo en su clase de arte. Las protestantes aseguran que en este caso en especial, la responsable fue arrestada inmediatamente, mientras que los miles de hombres que violentan de la misma manera contra mujeres, raramente pisan una prisión. Según los datos, de 5400 varones denunciados por ‘molka’, solo el 2% es encarcelado por un tiempo justo para este delito.