En un movimiento inesperado, los 3 grandes de la industria del videojuego Sony, Microsoft y Nintendo juntan fuerzas para apelar ante el gobierno estadounidense en contra de la nueva tarifa de bienes importados de China. Bajo el argumento de que esta decisión afecta a los consumidores, pone trabajos en riesgo y afecta a la innovación esta carta fue enviada a la oficina de Comercio representativo de Estados Unidos.
Todo esto es provocado por un incremento del 25% de aranceles a las consolas de videojuegos impuesto provenientes de china, esto fue impuesto por el presidente Donald Trump en una guerra comercial que, podría decirse, se encendió con el veto a Huawei hace unos meses.
El documento fue publicado el 17 de junio da detalles interesantes como que el 96% de consolas de videojuegos importadas Estados Unidos son manufacturadas en China debido a que ciertos componentes solo pueden ser fabricados en el país asiático.
Esta cadena de producción se desarrollo con china a lo largo de muchos años y cuenta con una inversión millonaria de compañías y socios. Atentar contra esto con un alza de impuestos causaría una interrupción de esta cadena y provocaría aumentar los costos mucho más de los 25% que propone Trump.
Sony, Microsoft y Nintendo argumentan que esto puede afectar a toda la industria incluido compañías grandes y pequeñas que se dedican a hacer videojuegos. De momento, no queda claro si las nuevas tarifas entraran en rigor inmediatamente. Mientras esto se desarrolla las charlas entre Estados Unidos y China continúan.