El ingeniero Ray Kurzweil ha deducido que una persona podría llegar a la inmortalidad en el año 2040 o 2050. Si bien se podría tomar como un comentario más del montón, lo cierto es que él ha acertado en un 86% de sus 147 predicciones. Esta información se dio a conocer en una entrevista realizada por Computerworld.
Según Kurweil en el futuro habrá máquinas microscópicas que podrán reparar nuestras células y órganos dañados. De esta manera, se erradicarán las enfermedades y se extenderá el tiempo de vida de las células y órganos. Además, la nanotecnología sería uno de los pilares en la medicina para obtener la inmortalidad del ser humano. En este sentido, se mencionó que los nanobots podrá incluso ir por el torrente sanguíneo y así reemplazar la sangre biológica. También se hace énfasis en que la combinación de nanotecnología y biotecnología acabará con el cáncer, Alzheimer, obesidad y diabetes. Actualmente, ya se está poniendo a prueba cómo direccionar un nanobot para que pueda ir directo al órgano o célula dañada y exterminarlo o curarlo (como el cáncer).
Esto, evidentemente, no exime que una persona no pueda morir por un accidente automovilístico o una enfermedad degenerativa. Sin embargo, si los nanobots fluyen por la sangre, podrían curar las heridas rápidamente o incluso restablecer extremidad. Y lo más asombroso, es que se podría acceder a las memorias y personalidades, tras un traumatismo craneal.