La cultura asiática siempre ha estado ligada al trabajo, y por ello, sus ciudadanos siempre se han caracterizado por esforzarse mucho. Algunos de ellos, incluso han sobrepasado el límite, creando una especie de ‘adicción al trabajo‘. Un tema que en la actualidad, se discute mucho en los países orientales.
Teniendo esto en cuenta, el gobierno quiso tomar medidas drásticas. Más que todo para incentivar a preocuparse por su salud. E iniciaron con una ley que ya fue aprobada: Recortar el número máximo de horas laborales por semana. Anteriormente, el máximo era 68 horas, pero este número fue reducido hasta 52 con la nueva ley.
Como segunda medida, el gobierno decidió ser aún más drástico. El día 30 de Marzo comenzará un ‘programa de desligamiento‘. El cual se trata de todo un evento que tomará meses y servirá para que paulatinamente, los trabajadores dejen la adicción al trabajo.
La primera fase comenzará el día ya mencionado, a una semana del presente. A partir de ese momento, todas las computadoras de los trabajadores, se apagarán a las 8 PM los viernes.
Poco después, en Abril, la segunda fase tomará inicio. La cual consiste en apagar las computadoras dos veces al mes (el segundo y cuarto viernes) a las 7:30 PM. De esta manera, ya se va formando un ‘hábito‘ salir del trabajo a esa hora, y esos días.
Finalmente, en Mayo el programa ya estará instaurado en la sociedad. Cada viernes del mes, las computadoras del gobierno se apagarán a las 7 PM y podrán retirarse a su hogar. Una medida que para entonces, todo trabajador debe cumplir.
Ante estas soluciones, los trabajadores han exclamado su posición. Y según el Gobierno Metropolitano de Seúl; el 67,1% de trabajadores, no quieren formar parte de este programa. Es decir, si fuese por ellos, seguirían trabajando en horarios inhumanos.
DaTEC: Los trabajadores en Corea del Sur laboran 2740 horas al año, aproximadamente. Esta cifra es superior por 1000 horas a cualquier país ‘desarrollado’. En conclusión, los surcoreanos trabajan 10,5 horas diarias, una cantidad que realmente se ha considerado la «semana laboral inhumana«.