Actualmente, los vehículos son imprescindibles en nuestro día a día y, según parece, no dejarán de serlo; al menos no en un futuro cercano. Así, como todo, estos tienden a evolucionar y mejorar, y la tecnología en el mundo vehicular ha comenzado a dar pasos agigantados. Tal es el caso, que hoy por hoy tenemos los llamados ‘Autos Conectados’.
Básicamente, un vehículo conectado es aquel que cuenta con acceso internet e, incluso, en muchas ocasiones, a una red de área local. Se estima que el mercado de estos automóviles, en 2027, alcanzará un valor de 215 mil millones de dólares. De esta forma, con la alta demanda, los carros habilitados para 5G se volverán la nueva norma.
Evidentemente, estos tipos de vehículos traen beneficios para los usuarios y el medio ambiente. Por esta razón, es más grato que alarmante saber que estos automóviles llegarán para quedarse y redefinirán a la industria automotriz como la conocemos.
De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas, anualmente, 1.3 millones de personas mueren en accidentes de tránsito. Asimismo, a este número se le suma un estimado de entre 20 y 50 millones si consideramos a quienes sufren heridas no fatales.
No obstante, la llegada de los vehículos conectados trae consigo la tecnología ‘Vehicle to Everything‘, una comunicación que establecerá un intercambio de información más fluido entre vehículos, peatones y el camino. Así, los conductores serán avisados de peligros cercanos, algo que disminuirá los accidentes.
Estos nuevos vehículos cambiarán el concepto de ser un elemento móvil que solo te llevará de un punto A a un punto B. Gracias a su tecnología, los automóviles conectados permitirán al usuario acceder a diversas aplicaciones de entretenimiento, como servicios musicales de streaming o audiolibros.
En la actualidad, según McKinsey, el 40% de usuarios cambiarían de marca de automóvil tan solo para tener una mejor conexión dentro de su vehículo. De hecho, se estima que para el próximo año, habrán más de 125 mil de motorizados con conectividad integrada al rededor de todo el mundo.
Varias de las características de la tecnología ‘Vehicle to Everything’ conseguiría mejorar la congestión vehicular en grandes ciudades. La comunicación entre vehículo e infraestructura podría alertar a su usuario de tal forma, que este logre economizar la gasolina y reducir las emisiones.
Con la conectividad 5G, los fabricantes podrán establecer conexiones más duraderas con sus clientes. Esto debido a que, gracias a esta tecnología, podrán ofrecer servicios adicionales; los cuales no serían posibles sin ellas.
Fuente: World Economic Forum