Qualcomm, Intel, Western Digital entre otras grandes empresas tecnológicas se unen a Google y rompen relaciones con Huawei por decreto de Trump
Hace unos días el gobierno de Donald Trump firmaba un decreto prohibiendo a cualquier empresa de Estados Unidos a utilizar equipos de telecomunicaciones o hacer negocios con empresas extranjeras. Según varios analistas esta medida estaría centrada en afectar directamente a Huawei y otras compañías chinas.
No ha pasado ni una semana desde este suceso y ya tenemos las primeras consecuencias. Qualcomm, fabricante mundial de chips de red y Intel, líder en la fabricación de procesadores y circuitos integrados, se suman a Google en romper relaciones de negocio con Huawei, según el portal Reuters.
Este es otro gran golpe para la empresa china, Intel es principal proveedor de procesadores para sus laptops con Windows bajo la marca ”Matebook”además, de utilizar sus servidores. Con respecto a Qualcomm el impacto sería menor, ya que Huawei estaba considerado un competidor directo y disponía de chips propios.
A estos grandes fabricantes se les suma Infineon Technologies( fabricante alemán de procesadores y tenía negocios anuales de casi 100 millones de dólares con la compañía china), Micron Technology, ST Microelectronics y Western Digital (líder mundial en discos duros y memorias) que también cortan relaciones con Huwaei, según el portal asiático Nikkei. Esta empresas se encuentran en discusiones internas para ver cómo les puede afectar esta decisión, aunque de momento no esta concretada según el portal Reuters.
Hace unos meses informamos como Huawei estaba preparando su propio sistema operativo en caso las tensiones con Estados Unidos empeoren, este parece ser el momento adecuado para utilizarlo. La compañía china fabrica sus propios procesadores con los ”Kirin” que llevan casi todos sus modelos. Ellos son de los pocos que pueden tener una dependencia, a nivel de hardware, que no puede tener otra compañía. Caso contrario es con el software que depende de las aplicaciones más usadas como Facebook, Netflix o Youtube que son compañías americanas y que, en teoría, también se encuentran afectadas por el decreto de Trump.
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