Todos sabemos que los dispositivos móviles sufren de una dependencia a los enchufes, baterías removibles y externas, lo cuál, resulta ser un dolor de cabeza para los usuarios intensivos.
Para solucionar esto, un grupo de científicos en colaboración con Nokia han desarrollado una tecnología capaz de cargar el dispositivo móvil con el ruido del ambiente.
Consiste en un nano-generador de energía que sería capaz de usar el ruido del tráfico, la música o la voz humana para cargar nuestro dispositivo. Han utilizado propiedades del óxido de zinc, un material que al ser aplastado o estirado crea un voltaje capaz de convertir cualquier movimiento en energía eléctrica.
El resultado es un dispositivo del tamaño de un Nokia 925 capaz de generar 5 voltios, lo suficiente para cargar un teléfono móvil.
El mayor reto es reducir los costos para producir este componente a escala industrial y lograr convertirse en un producto comercial compatible con todas las clases de dispositivos móviles.
Vía Alt1040
