Los centros de datos de Google son instalaciones gigantescas que mantienen los datos de todos los usuarios y mantenerlos en buen estado se traduce en una inversión bastante grande, sin contar el presupuesto necesario para su refrigeración, ahí nace Project Natick que busca ahorrar este último gasto llevando sus servidores al mar.
Project Natick consiste en investigar el resultado de almacenar sus servidores en capsulas y sumergirlas en el mar, de tal forma que el agua reduzca su temperatura y disipe el calor que generan estos servidores. Microsoft ya ha probado esta idea durante 3 meses y los resultados han sido prometedores.
Otra ventaja de tener instalaciones de este tipo bajo el océano es que tendríamos menos tiempos de respuesta ya que gran parte de la población vive cerca al mar. El beneficio a corto plazo es menor ya que el transporte e instalación de estos servidores es muy inferior a lo que se tarda en construir un edificio destinado a ser un centro de datos.
Algo que se quiere resolver es el tiempo de reacción ante un incidente, ya que al estar sumergido en el fondo del mar hay que preparar un equipo especializado para resolver esa incidencia en el tiempo requerido.
Por más interesante que parezca, aun es un proyecto experimental y depende de muchos factores para salir oficialmente.
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Vía: Microsoft