Parlamento Europeo decide no arruinar el Internet
El día de hoy, los miembros del Parlamento Europeo votaron sobre las nuevas reformas de derechos de autor. Estas representaban una amenaza a los memes, enciclopedias online, noticieros, y prácticamente todo lo que es bueno en línea.
Increíblemente, los legisladores decidieron no arruinar todo para todos, y votaron en contra de la ley. Todavía no está fuera de peligro, pero si es causa para celebrar.
En Junio, el comité de asuntos legales de la Unión Europea votaron a favor de continuar con el primer gran cambio en la ley de derechos de autor en Europa desde 2001.
Se esperaba que la votación del día de hoy convirtiera el proyecto de ley en realidad. Sin embargo, las críticas públicas, y una campaña realizada por varios miembros importantes del mundo tecnológico fueron exitosas.
En una votación de 318 a 278, los legisladores decidieron enviar la propuesta de regreso al comité para ser revisada. Se espera una nueva votación en Septiembre.
Great success: Your protests have worked! The European Parliament has sent the copyright law back to the drawing board. All MEPs will get to vote on #uploadfilters and the #linktax September 10–13. Now let's keep up the pressure to make sure we #SaveYourInternet! pic.twitter.com/VwqAgH0Xs5
— Julia Reda (@Senficon) July 5, 2018
La controversia sobre la nueva ley vino por dos Artículos increíblemente importantes.
El primero, el Artículo 11, instituía un «impuesto de vinculación». Este requeriría que los sitios web populares pagaran a los noticieros por colocar links a artículos o por utilizar citas de estos.
El segundo, el Artículo 13, requería un sistema de filtrado. Convertía en obligatorio que los mismos sitios utilizaran un sistema de filtrado de contenido para evitar que trabajos con derechos de autor fueran subidos a la web.
En ambos casos, el proyecto de ley no especificaba cómo las páginas debían implementar los requerimientos.
Estamos viviendo un momento crucial en el que los legisladores alrededor del mundo se están dando cuenta de que la tecnología grande debe ser regulada de alguna forma, y están apresurándose para hacer algo.
Pero deberían estar escuchando también a los miembros de la comunidad cuando estén creando estas regulaciones.
Es difícil explicar lo sorprendente que es ver a los políticos detenerse antes causar una crísis y decir «deberíamos reconsiderar esto».
Sin embargo, no hay garantía de que las consideraciones futuras producirán un mejor final.
La directiva de derechos de autor tomó a muchas personas por sorpresa, y no tuvo el tiempo de entrar a la conciencia colectiva de la misma manera que la neutralidad de red lo ha hecho.
Es más importante que nunca que los activistas metidos en este tema mantengan la conversación pública viva.