Este fin de semana, un pescador noruego saltó a la fama tras encontrar una ballena en la costa norte de su ciudad. Pero lo sorprendente es que al parecer, este espécimen sería un soldado de la Armada de Rusia.
Desde el primer contacto, el comportamiento bien amaestrado de la ballena y su vestimenta, sorprendieron al pescador. Por lo que no tardó en comentar el suceso a las autoridades de su país.
Poco después, el Instituto de Investigación Marina de Noruega, llegó hasta el puerto para investigar el caso. Lo científicos rastrearon al cetáceo inmediatamente y lograron dar con su paradero actual.
Cuando lograron retirar el armazón de la ballena, se evidenció una inscripción que decía: «Equipment of St. Petersburg.». Por lo que uno de los encargados se contactó con un investigador ruso para pedir explicaciones, pero éste negó su participación e indicó que podría tratarse de la Armada de Rusia. Después de esto, el animal fue liberado de vuelta a su habitad.
Curiosamente, el armazón tenía una especie de dispositivo para colocar una GoPro, pero la cámara nunca fue hallada:
DaTEC: Existe una larga historia sobre el uso animal en misiones militares. Estados Unidos y Rusia son los países que más realizan este procedimiento. En 2017, el Ministerio de Defensa Ruso confirmó que existen delfines, ballenas y focas amaestradas para misiones militares.