En el 2018, Netflix se aventuró y estrenó su serie interactiva «Black Mirror: Bandersnatch». Así, los usuarios podían elegir qué camino debía tomar el personaje, similar a un juego con historia interactiva. Sin embargo, parece que esto no le fue rentable a la compañía y desistirá de este tipo de formatos.
Según el director de juego de Netflix, Mike Verdu, los programas interactivas son cosa del pasado. Puesto que, al parecer, la tecnología del 2018 no permitía innovar más allá. Por este motivo, confirmó en una entrevista que ya no trabajarán más en este tipo de experiencias.
«La tecnología era muy limitada y lo que podíamos hacer en ese ámbito tenía un tope, pero aprendimos mucho de ello. Donde verás cómo el aprendizaje cobra vida es en estos juegos narrativos interactivos. Empezarás a sentirte cada vez más como si realmente estuvieras tocando el programa».