Desde que Nokia ya no fabrica sus teléfonos indestructibles, casi todos los smartphones tienen la fama de rajarse o romperse apenas se caen al piso en cierta posición. El nuevo Galaxy S6 Edge también recibió bastantes críticas, al especular que sus pantallas laterales se romperían al instante tan pronto el teléfono tocara el piso. Así que alguien decidió ponerlo a prueba y arrojó el equipo con fuerza al piso. Aquí el video:
¡Soprendente! Aun habría que probarlo tirar de distintas formas, ángulos y sobre otras superficies. Pero por lo que se ve en el video el Gorrilla Glass 4 con el que viene puede soportar golpes bastante fuertes.
¿Qué opinan? ¿Se atreven a hacer la prueba si se lo compran?
Vía YouTube