A pesar de no ser rentable todavía, el concepto del Metaverso de Mark Zuckerberg ha creado una tendencia que está empezando a volverse popular en múltiples compañías. Es por esto que Meta no se rinde y seguirá con su idea de convertir el mundo virtual en “el nuevo internet”. Para esto es necesario nuevo hardware, algo que está por llegar según una reciente filtración.
También puede interesarte
Tal y como indica The Information, la empresa de Mark Zuckerberg no estaría preparando solo uno, sino cuatro proyectos de lentes de realidad virtual y aumentada. Uno de esto sería Arcata, el que sería el sucesor del exitoso Oculus Quest 2 que sería una versión de gama más alta y que llegaría en septiembre.
Luego de esto, en 2024 se lanzaría Funston, la siguiente iteración de estos cascos de realidad virtual. A la par, también se lanzarán lentes de realidad virtual con nombres en clave Stinson y Cardiff que llegarán en 2023 y 2024 respectivamente. Con respecto a Arcata, se habla que contará con mayor resolución de imagen que permitirá leer texto y escribir mensajes sin problemas en su entorno de realidad virtual.
Lo que si se resalta es el precio y es que será mucho más caro que el Quest 2 costando casi los 800 dólares, doblando el precio recomendado del modelo actual. Se dice que contarán con una versión especial de Android y una potencia equivalente al de una Chromebook permitiendo ejecutar aplicaciones web, según The Information.
Por otro lado, en 2024 también llegarían las gafas de realidad aumentada Nazare con el nombre clave de Hypernova. Adicionalmente, se estaría desarrollando una pulsera con tecnología electromiografía y que supuestamente permitirá controlar ciertas opciones del dispositivo con el pensamiento. Se complementará con teléfono mediante conexión inalámbrica, pero todavía se concretan sus funciones finales.
Recordar que Meta ya ha perdido 3.000 millones de dólares en su división de realidad aumentada, algo que Mark Zuckerberg considera como parte de este largo camino para que el Metaverso sea una realidad apuntando al 2030 como un año “emocionante” para esta tecnología.