En la Universidad de Nueva York, ha anunciado que un grupo de cirujanos hizo historia tras trasplantar organos animales a humanos, y que estos funcionen correctamente. Al menos a corto plazo, pues los pacientes que recibieron estos organos continuarán en constante observación por parte del equipo.
La última operación sucedió a fines de Noviembre, cuando el céntro médico NYU Langone Health alojó un nuevo procedimiento de trasplante de organos animales. El organo en concreto es un riñón de cerdo que fue genéticamente modificado para un humano, pero este no fue adherido a su posición original en la estructura humana; si no fue cocido a los vasos sanguíneos de la parte superior de la pierna. Inmediatamente fue cubierto por un escudo protector y el paciente pasó a una etapa de observación durante 54 horas.
Durante todo ese tiempo, el riñón trabajó correctamente y el cuerpo humano no rechazó a este, así que se consideró como un trasnplante exitoso. Tal cual sucedió en la primera ocasión, esta operación fue realizada en Octubre, y a día de hoy el paciente continúa mejorando con un riñón de cerdo. Robert Montomery, director del Instituto de Trasplantes Langone, afirma que esta es la prueba que los organos modificados genéticamente pueden ser una fuente renovable de órganos para los humanos.