Esta semana la compañía fabricante de vehículos Honda sufrió un ataque cibernético que obligó a detener todas sus operaciones a nivel mundial. El incidente ocurrió el pasado 7 de junio y comprometió a toda su red comercial y de producción. La compañía se encuentra buscando una manera de solucionar este problema mientras trata de identificar a los responsables de este ataque.
El día martes 9, Honda comunicó que cerrará temporalmente sus fábricas de fabricación de productos como consecuencia de este ataque. Adicionalmente, también cesarán las funciones de servicios financieros y de clientes. La compañía aclaró que no tienen ninguna evidencia de pérdida de alguna identificación personal. De momento sus operaciones se mantienen en suspenso mientras tratan de solucionar este problema.
La compañía fue víctima de un ataque Ransonware del tipo “Snake”. Este virus informático encripta archivos de un computador con la amenaza de eliminarlos completamente si no se realiza un pago a cambio del “rescate”, como si se tratara de una situación de rehenes. Honda nombró a este incidente como un “ataque importante de ransonware” según su sistema de alertas interno.