La búsqueda por encontrar la vacuna definitiva con el Covid-19 puede traernos consecuencias inesperadas. Uno de los ingredientes necesarios para aumentar la respuesta inmune de las vacunas sería el escualeno. Este es utilizado actualmente en la medicina y proviene de un aceite vegetal elaborado en el hígado de los tiburones. Ahora, según muchos expertos y conservacionistas, hasta medio millón de estos animales podrían ser sacrificados en busca de este preciado ingrediente para la vacuna contra el coronavirus.
El laboratorio GalxoSmithKline tiene al escualeno de tiburón como uno de los componentes más importantes para su vacuna contra la gripe y anunció que fabricaría mil millones de dosis de esta sustancia de tiburón para su posible utilización para el coronavirus a inicios de mayo. Según cálculos, sería necesario unos 3000 de estos animales para poder conseguir una tonelada de escualeno.
Shark Allies, un grupo conservacionista de California, informa que se tendrían que matar unos 250,000 tiburones para poder obtener la cantidad de aceite de hígado necesaria para poder proporcionar a la población mundial la vacuna del Covid-19. Este número se duplicaría ya que, según investigadores, sería necesaria dos dosis para poder inmunizar a una persona. La directora del grupo, Stefanie Brendl, las consecuencias de utilizar tiburones para desarrollar las vacunas podrían ser devastadoras, más teniendo en cuenta que no se sabe cuándo podría acabar esta pandemia.
Se informa también que unos tres millones de estos animales mueren al año para usar su escualeno en cosméticos y aceites para maquinas. Pero no todos son malas noticias, otro grupo de científicos se encuentran experimentando una versión sintética de este elemento, basada en caña de azúcar fermentada, para poder proteger la población mundial de tiburones en el futuro.