En una orden oficial, el gobierno de China eliminará hardware y software extranjeros de instituciones públicas y de oficinas gubernamentales. La ordenanza 3-5-2 indica que todo lo eliminado será reemplazado por su contraparte china en los próximos 3 años. Se planea que gradualmente se reemplace el 30,50 y 20% de equipos extranjeros para los años 2020, 2021 y 2022 respectivamente.
Esto afecta a todo tipo de compañías como Intel, AMD, Dell o HP entre otras. Algunas empresas netamente chinas como Lenovo también se verían afectadas en esto porque utilizan componentes estadounidenses o extranjeros como con los procesadores Core ix o Ryzen.
Se especula que esta decisión haya sido tomada en represalia por el eterno bloqueo comercial que sufre China con Estados Unidos y que no parece solucionarse. El problema empezó a inicios de año y continúa con una incertidumbre bastante que dura hasta día de hoy. Con el tiempo el gobierno de Donald Trump empezó a habilitar algunas empresas de su país para que puedan trabajar con Huawei, sin embargo, la decisión de qué compañías pueden hacer esto es bastante arbitraria.