El exoesqueleto es una parte importante del futuro de la ingeniería, ya que estamos viendo conceptos de su uso en diferentes campos con resultados bastante esperanzadores. Este prototipo fue creado por James Hobson y confiesa que aunque no es muy seguro, alguien tenía que hacer.
Se trata de la continuación de uno de sus proyectos, antes creo un exoesqueleto dedicado a los brazos y ahora nos muestra uno dedicado a las piernas, pero con las actualizaciones y mejores que ha añadido en los últimos meses. Un detalle clave de este proyecto es que no depende del peso que puedan soportar las piernas del usuario.
Cada uno de los dos cilindros con el que el usuario se apoya en el suelo es capaz de soportar unos 362 kilogramos a 125 psi. Las uniones del exoesqueleto tienen trinquetes, que permiten al usuario mantener un peso levantado sin tener que hacer fuerza ni encender el sistema. En la prueba, consigue cargar sin ningún problema un Mini Cooper de 1 145 Kg.
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Vía: omicromo