Quienes ya se compraron y jugaron Crash Bandicoot N-Sane Trilogy, la colección de remasters de los exitosos juegos para la PlayStation original, notaron que, de alguna forma, estas nuevas versiones son más difíciles que las originales. Casi de inmediato los jugadores de la “vieja escuela” se enfrentaron a los noveles gamers en acaloradas discusiones de si “los jugadores de hoy se ha malacostumbrado con juegos fáciles” ó “Crash Bandoicoot es tan difícil como Dark Souls”. Pues bien, nuevamente la Internet se ha encargado de poner fin a este pleito con una contundente conclusión: Los juegos de Crash Bandicoot N-Sane Trilogy sí son más difíciles.
Para llegar a este veredicto, varios usuarios realizaron videos comparativos de ambas versiones; los originales y los remasters. Parte de la culpa se le atribuyó a que los remasters fueron trabajados en motores modernos que son mucho más precisos en sus reacciones físicas. En particular el usuario DinDongVG hizo notar que el arco de salto de Crash en los remasters el ligeramente más rápido que en los juegos clásicos.
Además, la “detección de colisión” -nombre que se le da al encuentro físico de dos objetos virtuales, y que incluye el contacto de pies con el suelo o el borde de una plataforma- ha cambiado significativamente con las mejoras de tecnología. Los sistemas de colisión actuales encierran a los personajes en una “cápsula” invisible para saber si están o no pisando un borde. La curvatura de la cápsula es precisa, así que ni bien un personaje se sale de ella, puede caer al vació. En la versión original esto no sucedía ya que el sistema de colisión de Crash lo encerraba en una “caja” con esquinas invisibles que no le permitían caer, así se pasara unos cuantos píxeles del borde de las plataformas. Esto sucedía incluso con juegos más antiguos como los de la serie Megaman (foto) y un sinnúmero de juegos de plataformas.
Así que no solo se trata de si perdimos o no alguna habilidad o si los gamers de hoy “se la llevan fácil”. Las mejoras en tecnología de desarrollo de videojuegos también tienen parte de culpa.
Vía Polygon