En la noticia insólita de la semana, un grupo de científicos del Centro Médico de la Universidad de Halle, en Sajonia, organizará y llevará a cabo un concierto con espectadores reales para poder comprobar si estos se puede contagiar de coronavirus. Por más preocupante que suene, el objetivo es poder cuantificar los contagios y diseñar un protocolo para contrarrestar la expansión del virus en un escenario como el mencionado.
Este estudio tendrá a 4000 voluntarios que participarán en un concierto que contará con la actuación real del cantante alemán Tim Bendzko en el estadio Arena de Leipzig. Se simularán 3 escenarios posibles para cumplir esta investigación. Primero se realizará el evento con las cualidades que se daban antes de la pandemia. Después se tendremos otro concierto, pero con las condiciones de salubridad e higiene correspondientes y se finalizará en un tercer escenario donde los espectadores mantendrán una distancia de 1,5 metros en las gradas.
Para simular condiciones realistas, los espectadores llegarán al estadio utilizando los tranvías. Estos voluntarios de 18 a 50 años serán equipados con mascarillas y gel hidroalcohólico que puede dejar marcas para comprobar las superficies más tocadas por los asistentes al concierto. La seguridad será la misma en todos los escenarios de prueba y serán monitoreados durante toda la duración del experimento.
Para evitar la posibilidad de participantes infectados, se realizará pruebas exhaustivas para comprobar que estén sanos antes de enlistarse cómo voluntarios. Se cuenta con la aprobación del Comité de Bioética de la Universidad Martin Luther Halle-Wittenberg y se realizará en agosto. Según su web oficial, van registrados 988 voluntarios a día del 22 de julio.