Hace aproximadamente un año que fue reportado en Wuhan, China, el brote de una nueva enfermedad. Quién diría que estos aparentemente pequeños incidentes marcarían el inicio de una pandemia cambiaría el mundo de manera radical. Desde su inicio, el país asiático recibió críticas debido a la forma en la cual gestionaron esta crisis sanitaria.
Es en este escenario donde aparece la periodista Zhang Zhan, de 37 años de edad, que cubrió el inicio de la pandemia en Wuhan a través de redes sociales. Ahora el gobierno chino sentencia a esta reportera a cuatro años de prisión solo por ejercer su profesión. Según los detalles del caso, la comunicadora es responsable de “buscar pelea y crear problemas” debido a que narró en internet los primeros casos de contagios reportados en Wuhan hace casi un año.
Ella fue una de las primeras en hacer este tipo de reporte exponiendo al mundo la situación del epicentro de la pandemia para ese entonces. Zhan fue detenida en mayo y desde entonces había permanecido en prisión preventiva hasta septiembre, donde fue acusada de manera formal.
El documento de denuncia la acusa de distribuir información falsa mediante textos, videos y otros medios a través de redes sociales, además de aceptar entrevistas a medios extranjeros como Radio Free Asia y el tabloide Epoch Times. Este último forma parte de una organización religiosa llamada Falun Gong y que está prohibida en China.
La periodista comenzó una huelga de hambre en septiembre para exigir su liberación acudiendo a su juicio en silla de ruedas dado su deterioro físico. Su abogado acusó al fiscal de solo leer las acusaciones sin mostrar pruebas importantes que sustenten el caso, declarando que la expresión de los ciudadanos no debe ser censurada.
La polémica en China continúa generando diversas manifestaciones que exigen su liberación y la de otros reporteros independientes fuera del Tribunal Popular de la Nueva Área de Pudong. Esta congregación de personas fue dispersada de manera violenta por la policía local.