En un reciente comunicado, la NASA anuncia un hallazgo que evidencia la existencia de un nuevo planeta. El descubrimiento fue realizado por Wolf Cukier, un becario de tan solo 17 años que llevaba tres días de trabajo. Su labor era usar el satélite TESS (Transitioning Exoplanet Survey Satelllite) para capturar imágenes para y posteriormente subirlas al proyecto Planet Hunters TESS.
Cucker sólo tenía la labor de examinar variaciones en el brillo de las estrellas con el satélite TESS. Declara que realizó el descubrimiento de mera casualidad, confundiendo el cuerpo celeste por un eclipse estelar. Grande fue su sorpresa al darse cuenta que se trataba de un planeta que fue nombrado como TOI 1338b por la NASA y que es aproximadamente 6.9 veces más grande que la tierra.
El planeta cuenta con regulares eclipses solares y estará en órbita por los próximos 10 millones de años según la agencia espacial. El ojo humano está mejor equipado que cualquier algoritmo para detectar cambios o patrones sutiles según la explicación del investigador Veselin Kostov.