En el 2017, la Antártida sufrió de un gigantesco desprendimiento de hielo, a lo que se conoció como la fragmentación de la época; pues el bloque desprendido medía nada más y nada menos que 5100 Km2.
Este enorme ‘iceberg’ se convirtió en el más grande del mundo desde entonces, pues su tamaño se compara a países enteros. Ahora, como la Antártida está dividida en cuadrantes, este nuevo iceberg pasó a apodarse como ‘A-68′, y actualmente también se está fragmentando.
Según el experto Adrian Luckman, la fragmentación de este iceberg era cosa de tarde o temprano. Lo que preocupa es que estos pedazos podrían nadar hasta encontrarse con la tierra, aunque es poco probable. Eso sí, el bloque desprendido es de 175 Km2, mas o menos unas 20 cuadras.
Ahora, no se han descartado más desprendimientos del gigantesco A-68 en los próximos meses, y estos bloques enormes deambularán por muchos años hasta desaparecer.