¿Realmente ayuda el arroz si nuestro teléfono se cayó al agua? Un estudio nos da la respuesta

¿Alguna vez escuchaste que debías meter tu celular en arroz luego de que se haya caído al agua? Probablemente sí; y es que, durante años, dicha creencia se ha esparcido por cientos de miles de personas. Sin embargo, un reciente estudio reveló que no es así. El ingrediente en cuestión no puede arreglar ni salvar tu dispositivo.

En caso de que tu celular haya entrado en contacto con algún líquido, puede que haya llegado a su final. Los componentes de estos dispositivos son extremadamente sensibles a la humedad. Sin embargo, es importante mencionar que también dependerá del smartphone que tengas; ya que hay modelos cuyo blindaje es superior.

Por ejemplo, los nuevos celulares de Apple, los iPhone 12, y los Samsung Galaxy S21 tienen una clasificación IP68. Esto indica que son bastante resistentes a cierta exposición al agua. Por su parte, los primeramente mencionados, pueden aguantar un máximo de 6 metros por 30 minutos. Por otro lado, la distancia que los Samsung resisten es de 1 1/2 por la misma cantidad de tiempo.

En caso de que te encuentres en esta lamentable situación, hay una serie de recomendaciones mejores que poner tu teléfono en arroz. Lo primero que hay que hacer es limpiarlo y secarlo, evitando que el líquido alcance componentes internos. 

El estudio en cuestión sugiere que no menos del 25% de usuarios ha sufrido este accidente. Por esta razón, el equipo ha dado una serie de pasos que podrían ayudar a recuperar nuestro smartphone. Si las recomendaciones que dejamos a continuación no funcionan, lo mejor será llevar el aparato a algún técnico o especialista.

¿Qué hacer si mi teléfono cae al agua?

1. Apagar el dispositivo y no presionar absolutamente nada. Si nuestro teléfono ha entrado en contacto con un líquido que no sea agua y es resistente a líquidos como los últimos modelos, Apple y Samsung recomiendan enjuagarlo, cuidadosamente, para evitar que queden residuos.
2. Secar el celular con papel absorbente o un paño suave.
3. Agitar suavemente el dispositivo para el eliminar el agua de los puertos de carga. Procura que los movimientos sean delicados; De lo contrario, podríamos esparcir el líquido por el interior del terminal.
4. Retirar la tarjeta SIM.
5. Si disponemos de alguna aspiradora, ventilador o algún dispositivo que pueda aspirar, se recomienda usarlo con cautela. Sin embargo, herramientas como secadores de pelo puede averiar componentes, fundir otros o incluso romper los sellos de goma que evitan que el agua pase a lugares sensibles. Esto debido al calor
6. Una vez concluido el procedimiento, dejar el teléfono en un recipiente cerrado y con paquetes de gel de sílice.
7. No se recomienda cargar el teléfono hasta que se esté totalmente seguro de que está seco, pues esta acción puede llegar a generar más daños. Se insta que se esperen entre 5 y 10 horas antes de volver a intentar poner en funcionamiento el terminal.

Fuente: Vandal