En el mundo moderno, no solo tenemos que preocuparnos de proteger nuestras cuentas personales o contraseñas, sino también nuestro ADN.
Sucede que la compañía experta en pruebas de ADN, 23andMe, acaba de despedir a 100 empleados por proteger la privacidad genética. Esto porque se evidenció una baja considerable en las ventas de la empresa, y los dirigentes temen que sus empleados vendan los registros genéticos a terceras empresas.
Después de todo, este tipo de datos se venden a precios exorbitantes, y en vista que la empresa no puede subir el sueldo de sus empleados, estos podrían buscar una alternativa. Esto es lo que argumenta Anne Wojcicki, CEO de 23andMe.
Además, el Pentágono, o sea el Ministerio de Defensa de los Estados Unidos; envió un comunicado nacional que pedía a los ciudadanos evitar las pruebas de ADN. Esto porque estos datos pueden ser robados para crear un ataque militar enemigo.